Britney Spears está viva. Eso es lo primero que hay que aclarar en medio de todo el escándalo que se ha tomado las redes sociales en la mañana de este lunes luego de conocerse la supuesta muerte de la cantante.

Toda una convulsión se ha generado debido a un ataque cibercriminal del que fue víctima la compañía Sony. Resulta que el grupo de hackers OurMine logró acceder a la cuenta de Twitter oficial de la disquera y en dos tuits anunció que la intérprete de temas como ‘Toxic’ y Britney ‘I Wanna Go’ había muerto. 

De inmediato la locura se apoderó de los fans que volvieron tendencia mundial en cuestión de minutos el fallecimiento de la artista. 

Sin embargo, la ortografía de la publicación puso a más de uno a pensar qué estaba pasando. Sin embargo, todo se hizo más confuso cuando desde la cuenta oficial del Nobel de Literatura Bob Dylan apareció un tuit lamentando la muerte. 

Como bola de nieve creció la falsa noticia e incluso al hacer la búsqueda de Britney Spears  en Wikipedia, esta enciclopedia también la daba por muerta describiendo que “fue una cantante, bailarina, compositora, modelo, actriz, diseñadora de modas y empresaria estadounidense”. 

No obstante, los dos trinos fueron a los pocos minutos eliminados de las cuentas de Sony y Dylan, de este último se estima que también fue víctima del hackeo. 

Al conocerse el hecho, CNN se puso en contacto con el manager de Britney, quien aseguró que "Creo que su cuenta fue hackeada”.

De hecho, Sony escribió posteriormente que habían detectado “actividad inusual y un acceso a la cuenta desde otra dirección IP”. Todos los trinos, en últimas, fueron borrados.